Varios vuelos, horas de sueño, mucho trabajo y mucho cansancio, pero merecieron la pena.
Dos rings de 30×40 metros, 2 equipos de trabajo, un suelo cuidado, un sitio fantástico, gente agradable, un sol abrasador y trombas de agua cada media hora. Tiempo loco como los gallegos que me llevaron a juzgar :P
Mil gracias por la invitación, gracias a la organización y a todas las personas que estuvisteis bailando a cada detalle que os decía.
Y gracias también a los competidores, por ese esfuerzo (titánico a veces) para luchar cada rincón de cada pista.
Ha sido un placer compartir este fin de semana con todos vosotros, como lo ha sido aportar mi granito de arena a la Regional de Galicia. Me lo he pasado pipa.
Nos vemos en la siguiente.